Tiktok, la plataforma por excelencia que nos regala múltiples momentos de entretención y abre una brecha para echar un vistazo de lo que pasa en el mundo. Este fue el caso de una bisabuelita que demostró que no existe límite de edad ni momento más oportuno para bailar y qué mejor, que brillar con unos pasos de perreo en compañía de tus seres queridos.
Un video publicado por el usuario Juan Carlos Burg dejó a los internautas asombrados; una familia disfrutaba de una reunión cuando decidieron realizar un concurso de baile, hombres y mujeres de mediana edad demostraron sus habilidades contoneando la cadera y entre risas, todos aplauden y bromean: ¡aguas, no se vayan a caer!, narra el joven que tomó el video.
Al termino, aparece la mujer de 99 años que mueve los brazos e intenta agacharse al ritmo de la música, “¡cuidado con los calambres!” se escucha que gritan sus familiares y la animan a continuar bailando, al termino de su participación, la bisabuelita aplaude y sonríe con alegría hacia su familia, quienes grabaron el divertido, pero memorable, momento.
Los comentarios de los internautas lo tomaron con humor y comenzaron a llamarla “motomami” y “bichota” por sus pasos de baile que se viralizaron rápidamente. Hasta el momento el vídeo cuenta con más de 15 mil reproducciones.
La importancia de la inclusión en la vejez
A medida que la vejez llega, se hace presente un fenómeno de exclusión de su entorno social, una violación directa a los derechos humanos pues responde a una estimatización de que, a su edad, son personas que no son capaces de aportar algo, ser independientes y se desvaloriza su figura como actor social, al respecto, la Cartilla sobre los efectos de la exclusión social en los derechos humanos de las personas mayor señala lo siguiente.
La exclusión de las personas mayores puede ser el resultado de diferentes situaciones relacionadas con el estigma de sus capacidades (…) existe una falta de reconocimiento de su potencial, este desconocimiento, estilizada a estereotipos y prejuicios, según los cuales, dictan que las personas mayores son frágiles y vulnerables.
Asimismo, el documento señala que la exclusión desde el hogar, a través de prácticas como no integrar al adulto mayor en ciertas actividades o planes, desencadena en serios problemas emocionales como la depresión o el aislamiento, por lo que reconocer el derecho a su autonomía y a su participación en el hogar, rodeadx del apoyo de su familia es un gran paso para la dignificación acompañada y respetada de la vejez.
Con información de Silla Rota
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