México.-Fresnillo, el municipio más inseguro de todo México, se ha convertido en el epicentro rural de la guerra entre cárteles que mantiene en vilo a Zacatecas, aseguraron especialistas.
El pasado 5 de febrero los trabajadores que llegaron a las seis de la mañana a las maquiladoras en la comunidad de Pardillo III fueron testigos del lado más crudo de Fresnillo: diez cuerpos envueltos en cobijas y bolsas de plástico negro aseguradas con cinta adhesiva.
Desde una camioneta, hombres armados los fueron colocando a cinco o diez metros uno de otro, a lo largo de dos calles del centro. “No los arrojaron. Los fueron como acomodando”, dijo un testigo citado por el periodista Héctor de Mauleón. Los cadáveres se hallaban envueltos de pies a cabeza: no se les apreciaban los rasgos.
Mientras las autoridades trabajaban en la escena un dron sobrevoló la zona. Los periodistas negaron ser los responsables de dicho artefacto. La conclusión fue que los autores de aquella masacre estaban contemplando su obra.
Simultáneamente eran descubiertos seis cadáveres más, colgados de las puertas y ventanas de una bodega de las comunidades de San Pablo y Santa Elena, en la comunidad de Pánfilo Natera, a unos cien kilómetros de distancia.
Se trataba de jóvenes. Algunos de ellos salían apenas de la adolescencia. Habían sido torturados y los habían colgado con cuerdas amarillas. Les habían pegado cartulinas en la ropa: “Cártel de Sinaloa. MZ”, decían. La firma del Mayo Zambada.
“Esto les bapasar a todos los estorsionadores cobra cuotas y secuestradores. Atte. MZ” (sic), decía otro mensaje que estaba tirado en el suelo de tierra de la bodega, junto a un tenis abandonado.
Apenas el 5 de diciembre se habían descubierto en Fresnillo nueve bolsas con restos humanos. Cuatro de ellas fueron abandonadas a espaldas del Panteón de Santa Cruz y otras cinco aparecieron en el centro de la ciudad (esquina de Durango y Encino).
Fuente Agencia
Discussion about this post