EU.-Una pareja de padres adoptivos, Nanay y Tatay, recibieron una lujosa casa como regalo de su hijo, a quien adoptaron con tan solo tres meses de edad y pese a su vulnerable situación económica.
Sin embargo, la pareja no imaginó que al crecer, su hijo se convertiría en un empresario millonario. Y, pese a que ellos no lo adoptaron para obtener alguna ganancia o beneficio. Ahora, el adulto les reconoció su esfuerzo de esta manera.
Y es que, Jayvee Lazaro, el hijo adoptivo de la pareja, se convirtió en un empresario con vasta solvencia económica. Por ello, compró una lujosa casa para sus padres, así como los provee de una vida sin preocupaciones.
Jayvee Lazaro fue adoptado a los tres meses por Nanay y Tatay, originarios de Filipinas, la pareja también tiene un hijo biológico y a ambos los criaron con mucho amor y todo lo que pudieron.
Pues, el matrimonio no pasaba por la mejor etapa económica cuando Jayvee llegó a la familia. Incluso el ahora empresario recuerda que su vivienda tenía un techo de lámina y no había comodidades.
Y es que, su madre adoptiva era vendedora y su padre porteador. Para la familia no había dinero que rindiera, por esta razón no contaban con agua ni luz en su casa.
Pese a las carencias materiales, a Jayvee y a su hermano nunca les faltó el cariño de sus padres, combustible que lo impulsó a salir adelante y abrirse su propio camino en la vida.
Hijo adoptivo se hace millonario
Jayvee trabajó desde pequeño como vendedor ambulante y auxiliar de cocina, sin embargo, fue en una empresa donde no contaba con una cita que se quedó a laborar, gracias a sus habilidades para vender.
“Tenía que estar trabajando como estudiante, y estábamos felices de que Na pudiera hacer 2 comidas al día. Además de eso, vivíamos en un apartamento de 20 metros cuadrados”, expresó en su publicación de Facebook.
En menos de cinco años, el joven había escalado al puesto más alto y, pensó en regalarle una casa con cochera, tres pisos, siete habitaciones y todas las comodidades sus padres. Así como hacerse cargo de ellos y quitarles toda preocupación económica que pudieran tener.
“Ahora que tengo la oportunidad de devolverles algo de lo que me dieron, me voy a asegurar de que vivan sus sueños, más de lo que podrían imaginar”, compartió el hijo adoptivo de la pareja.
Fuente Agencia
