EU.-Una niña de 11 años fue hallada muerta debajo de su cama después de que llamara a su padre por teléfono y le avisara que alguien estaba tocando a la puerta.
María González fue estrangulada y abusada sexualmente en su casa ubicada en el número mil de Main Street, en Pasadena, California, alrededor de las 15:00 horas.
El padre de la menor, Carmelo González, de 32 años dijo a la policía que su hija le había llamado por teléfono para avisarle que “alguien estaba tocando la puerta y yo le respondo ‘pues no le abras, porque yo apenas estoy llegando’. Y me dijo: ‘Está bien, yo estoy en mi cama'”.
Cuando el Carmelo llegó a casa vio que “en toda la sala había regada azúcar, el sofá todo movido. Intentó defenderse mi pobre niña. Quisiera regresar el tiempo atrás y vivir la vida más feliz con ella”.
Elementos de seguridad llegaron y trataron de asistir a María, pero fue declarada muerta. Según los investigadores, el papá había salido del departamento a las 09:45 horas y al llegar a casa vio el cuerpo de la menor debajo de la cama.
“El médico forense concluyó que la causa de la muerte fue asfixia por estrangulamiento. La investigación adicional determinó que la víctima fue agredida sexualmente”, dijo la policía de Pasadena.
El caso está siendo investigado por las autoridades pero hasta el momento no se ha detenido a nadie y la policía seguía buscando al asesino.
“Estamos haciendo todo lo posible por esclarecer y resolver este crimen”, declaró Josh Brugger, jefe del Departamento de Policía de Pasadena, a la prensa. “Como padre de una niña de casi 10 años, ciertamente esto es un motivo de preocupación”.
Según Brugger, el apartamento es relativamente pequeño y está ubicado a unas 13 millas al sureste del centro de Houston en una “comunidad bastante unida” y es “una urbanización relativamente tranquila”.
“Sin duda, se trata de un crimen muy violento”, dijo Brugger, que calificó las circunstancias del caso como brutales.
“No podemos hacer nada ya, lo que queremos es encontrar al culpable de todo eso”, expresó Carmelo González.
