México.- El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, desestimó la constante subida de inflación en el país, señalando que “no es para alarmarse”, pese a que lleva dos meses con incrementos en la tasa.
En días pasados se informó que la tasa de inflación general en México alcanzó un 7.91 por ciento en enero pasado, el mayor nivel para un cierre de año en lo que va del siglo.
Durante su rueda de presan, que ahora se realizó en el estado de Jalisco, López Obrador refirió que el jueves pasado, el Banco de México (Banxico) incrementó la tasa de interés un récord de 11 por ciento por la subida de 50 puntos base, desligándose del mismo ritmo de la Reserva Federal de Estados Unidos.
“Ya pensamos que va a bajar más, no vamos a dejar de enfrentar el problema inflacionario, nos preocupa y nos ocupa, pero no es para alarmarse. Sí, yo creo que ya es el último incremento (de inflación) que, por cierto, no fue muy superior a lo que se esperaba, no llegó ni a un punto.
“Yo quisiera que el Banxico no solo se ocupara del control de inflación, sino que también pensaran en el crecimiento económico porque esa fórmula de que, si hay incremento de inflación, aumentan las tasas, que es lo que se aplica a nivel mundial, pues es lo ortodoxo”, comentó al respecto López Obrador.
El mandatario federal señaló que se tiene que pensar en otras acciones como lo que hace su gobierno de apoyar la actividad productiva, no aumentar los precios de las gasolinas, del gas o de la luz.
Por otro lado, criticó que este tipo de iniciativas “no lo hacen, no lo recomiendan” en el Banco de México ni en otros bancos centrales en el mundo.
De acuerdo con la más reciente encuesta de Citibanamex a los expertos del sector privado, los analistas proyectan por consenso que la tasa de interés cierre el año en un 10,5 %, mientras que esperaron que la inflación general caiga hasta un 5,13 % al cierre del año.
Con Información de Comunicado