El presidente de Ucrania, Volodímir Zelensky, sostuvo este lunes una serie de conversaciones con líderes europeos, encabezados por el mandatario francés Emmanuel Macron, con el fin de influir en la propuesta de paz impulsada por el presidente estadounidense Donald Trump. El diálogo tuvo lugar en París, un día antes de que Trump sostenga un encuentro crucial con Vladimir Putin en Moscú.
La visita de Zelensky ocurre en un contexto complejo para Ucrania: según un análisis de AFP basado en datos del Instituto para el Estudio de la Guerra (ISW), las fuerzas rusas lograron en noviembre su mayor avance territorial en un año. A esta presión militar se suma la tensión política interna, marcada por un escándalo de corrupción que recientemente llevó al cese de Andrii Yermak, jefe de gabinete del mandatario ucraniano.
Estados Unidos presentó hace diez días un borrador de plan de paz compuesto por 28 puntos, redactado inicialmente sin la participación de los aliados europeos. Tras el descontento, Washington hizo ajustes al documento luego de una reunión en Ginebra con representantes europeos y ucranianos. Sin embargo, varios temas clave aún requieren modificaciones, señaló el negociador ucraniano Rustem Umerov, quien reportó “avances significativos” tras reunirse en Florida con el enviado estadounidense, Steve Witkoff.
El borrador inicial planteaba condiciones consideradas muy favorables a Moscú, incluyendo la retirada total de las fuerzas ucranianas de la región de Donetsk, el reconocimiento de facto de Donetsk, Lugansk y Crimea como territorios rusos, la reducción de las fuerzas armadas ucranianas y la incorporación en su Constitución de la renuncia a entrar en la OTAN.
Ante ello, Macron advirtió que cualquier plan “solo puede finalizarse” con Ucrania y Europa presentes en la negociación. El mandatario francés recalcó que asuntos esenciales —como los activos rusos congelados, las garantías de seguridad a Kiev y el eventual ingreso ucraniano a la Unión Europea— requieren la participación directa de los socios europeos.
Otros líderes, como el canciller alemán Friedrich Merz, se mostraron firmes al señalar que Europa se opondrá a cualquier “paz dictada” a Ucrania. Mandatarios del Reino Unido, Polonia, Italia, así como representantes de la Unión Europea y la OTAN, también participaron en las conversaciones a distancia.
Mientras tanto, sobre el terreno, los ataques rusos continúan. Este lunes, las autoridades ucranianas informaron que al menos cuatro personas murieron y otras 22 resultaron heridas tras un ataque con misil contra la ciudad de Dnipró.
La esposa del presidente ucraniano, Olena Zelenska, también se encuentra en Francia para participar en un evento de la iniciativa “Bring kids back”, que ha permitido el retorno de cerca de dos mil menores ucranianos que fueron trasladados a Rusia, un hecho considerado crimen de guerra por la Corte Penal Internacional.
El resultado de las negociaciones y el encuentro entre Trump y Putin será determinante para el rumbo del conflicto, en un momento en que la guerra entra en una nueva fase militar y diplomática.



