Ciudad de México.- Anna Ferro, viuda del conductor argentino Fernando del Solar, habló públicamente sobre el avance del proceso testamentario de su esposo y desmintió los rumores que señalaban a Ingrid Coronado como heredera. La instructora de yoga aclaró que la expareja del presentador no fue incluida en la última voluntad del conductor.
En entrevista con el programa Venga la Alegría, Ferro explicó que Coronado únicamente aparece en el testamento como tutora y representante legal de los hijos que tuvo con Fernando, lo cual —recalcó— es un procedimiento habitual cuando los herederos son menores de edad. “Ella está como tutelar de sus hijos, por eso aparece como representante legal, pero Fer en ningún momento la mencionó para nada”, puntualizó.
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La también instructora reveló que fue ella misma quien solicitó abrir el testamento anteriormente, pero que el trámite se detuvo sin razones claras. Esta pausa ha retrasado la distribución formal de los bienes del conductor, a pesar de que —según Ferro— el documento es sólido y bien estructurado.
Actualmente, Ferro está a la espera de que se le otorgue el título de albacea, lo que le permitiría administrar temporalmente el patrimonio de Fernando del Solar. Sin embargo, afirmó que enfrenta oposición de parte del entorno legal vinculado a Coronado. “La otra parte no quiere que yo tenga el título de albacea porque dice que hay conflicto de intereses. Estamos esperando y esto se está alargando un poco más”, señaló.
A pesar del conflicto, Ferro reiteró que su único objetivo es respetar la voluntad de su esposo y garantizar que sus hijos estén protegidos. “Dejó todo bien estipulado, todo bien puesto para que cada uno estuviera protegido conforme sus necesidades y como él lo quería”, aseguró.
La disputa legal por el testamento ha generado atención mediática, especialmente por los desacuerdos entre Ferro y el círculo cercano de Ingrid Coronado. No obstante, Ferro insiste en que su prioridad es cumplir con la ley y con lo que Fernando del Solar dejó claramente establecido.
El proceso continúa sin una fecha definida para su resolución, a la espera de que se nombre formalmente al albacea y se valide de manera definitiva el contenido del testamento.
