Uruapan, Michoacán.– La Fiscalía General del Estado (FGE) inició una profunda reestructuración interna denominada “Operación Limpieza”, mediante la cual todo el personal adscrito a la Fiscalía Regional de Uruapan será removidoen los próximos días. La medida se toma tras los recientes hechos de violencia registrados en el municipio y con el fin de fortalecer el trabajo operativo y de investigación en una de las zonas con mayor incidencia delictiva en la entidad.
De acuerdo con fuentes internas consultadas por EL UNIVERSAL, la decisión fue tomada después del asesinato del alcalde Carlos Manzo Rodríguez, ocurrido el pasado 1 de noviembre. El crimen, que causó conmoción estatal, llevó a la institución a evaluar el desempeño y las estructuras internas en esa región, concluyendo en la necesidad de una renovación total de su personal.
Remoción completa del equipo actual
La reestructuración incluye la salida del fiscal regional, así como de peritos, agentes del Ministerio Público, elementos de investigación y personal administrativo, quienes serán relevados en bloque. El objetivo, señalaron las fuentes, es cortar cualquier posible red de complicidades, fortalecer la integridad institucional y garantizar un funcionamiento más eficiente en las investigaciones relacionadas con violencia organizada y delitos de alto impacto.
Nuevo equipo será seleccionado “con lupa”
Se prevé que el anuncio oficial sea realizado entre lunes y martes por el fiscal general, Carlos Torres Piña, quien designará personalmente al nuevo equipo que asumirá la Fiscalía Regional. Los perfiles, indicaron, serán analizados minuciosamente para garantizar que el personal entrante se encuentre libre de posibles vínculos con grupos delictivos y cuente con la capacidad técnica requerida.
La llegada del nuevo equipo busca reforzar la presencia institucional en Uruapan, así como recuperar la confianza ciudadana en las investigaciones y procesos ministeriales que se llevan a cabo en la zona.



