Zapopan, Jalisco.– A pocos meses de que el Estadio Akron reciba a miles de visitantes durante el Mundial 2026, un hallazgo estremecedor ha vuelto a evidenciar la profunda crisis de desapariciones en Jalisco. Colectivos de madres buscadoras localizaron más de 400 bolsas con restos humanos en distintos puntos del municipio, dentro de lo que describen como un “corredor de fosas clandestinas” operado por grupos criminales.
De acuerdo con información preliminar, los restos fueron encontrados en tres zonas distintas:
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Las Agujas: alrededor de 270 bolsas.
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Nextipac / Plan de la Noria: 89 bolsas.
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Arroyo Hondo: 48 bolsas.
El hallazgo fue reportado por el colectivo Guerreros Buscadores de Jalisco, encabezado por Indira Navarro, quien informó que las búsquedas se realizaron en un área previamente intervenida, pero —según denuncian— abandonada por las autoridades pese a las alertas emitidas por las familias de personas desaparecidas.
Navarro indicó que los sitios presentan indicios de entierros masivos, cremaciones improvisadas y fosas recientes, en un estado que enfrenta una crisis que supera las 15 mil personas desaparecidas, de acuerdo con registros oficiales.
Autoridades procesan la zona, colectivos exigen transparencia
La Fiscalía del Estado de Jalisco confirmó que personal especializado del Instituto Jalisciense de Ciencias Forenses trabaja en la recuperación e identificación de los restos. No obstante, organizaciones de búsqueda han acusado nuevamente falta de transparencia y exclusión en los procedimientos, situación que —aseguran— ya se había presentado en el caso del Rancho Izaguirre, otro sitio de exterminio localizado este mismo año.
Organismos de derechos humanos y Amnistía Internacional exigieron una investigación exhaustiva, recordando que Jalisco encabeza la lista nacional de fosas clandestinas, con al menos 186 sitios procesados desde 2018.
La violencia frente al escenario mundialista
Mientras el estado se prepara para recibir la atención internacional por la Copa Mundial de Futbol 2026, cientos de familias continúan realizando búsquedas por cuenta propia, cavando en silencio en parajes rurales y barrancas donde aún esperan encontrar a sus seres queridos.
El contraste entre el espectáculo y la violencia cotidiana marca una dolorosa realidad que, según colectivos y organizaciones civiles, evidencia que la paz y la justicia siguen siendo las grandes deudas pendientes en Jalisco.
