Ciudad de México, 6 de noviembre de 2025.— En los últimos 25 años, México ha registrado el asesinato de 119 presidentes municipales en funciones o electos, lo que equivale a un homicidio cada dos meses y medio, de acuerdo con un análisis realizado por El Universal.
El sexenio de Enrique Peña Nieto (2012-2018) figura como el más violento, con 42 alcaldes asesinados, seguido por el de Felipe Calderón Hinojosa (2006-2012) con 37 casos. En tercer lugar se ubica el periodo de Andrés Manuel López Obrador, con 26, mientras que durante el actual gobierno de Claudia Sheinbaum Pardo se han registrado 10 homicidios hasta la fecha.
Oaxaca y Michoacán, los estados más afectados
El estado con más asesinatos de presidentes municipales es Oaxaca, con 24 casos, seguido de Michoacán (20), Veracruz (13), Guerrero (12), Puebla (8), Durango (6) y Jalisco (5). En tanto, Chihuahua y Estado de Méxicoreportan cuatro casos cada uno.
Entre las víctimas, 38 alcaldes pertenecían al PRI, 19 al PRD, 18 al PAN, nueve a Morena o al PVEM, cinco a MC o al PT, y el resto eran independientes o de partidos locales.
Modus operandi: emboscadas y ataques directos
Según la revisión del medio, la emboscada seguida de ejecución con arma de fuego es el método más frecuente de ataque. En muchos casos, los alcaldes fueron asesinados junto a familiares, escoltas o choferes. También se documentaron asfixias, secuestros, apuñalamientos, estrangulamientos e incluso un caso de decapitación y otro de lapidación.
Algunos ediles habían sido reportados como desaparecidos y posteriormente hallados sin vida en lotes baldíos o viviendas abandonadas.
Amenazas y denuncias previas
Diversos presidentes municipales habían denunciado amenazas antes de ser asesinados. Tal fue el caso de Ambrosio Soto Duarte, alcalde de Pungarabato, Guerrero, quien advirtió en 2016:
“Mataron a mi primo, estoy amenazado por la delincuencia organizada. Ya es hora de actuar, señor presidente Enrique Peña Nieto”.
Otro ejemplo es el de Maricela Vallejo Orea, alcaldesa de Mixtla de Altamirano, Veracruz, quien denunció haber recibido amenazas y ofrecimientos de dinero para no asumir el cargo; fue asesinada en 2019 junto a su esposo y chofer.
Persistente violencia política
De acuerdo con datos de Data Cívica, de 2018 a la fecha al menos 85 alcaldes adicionales han sido víctimas de atentados, amenazas, secuestros o ataques, lo que evidencia la continuidad de la violencia política en distintos niveles de gobierno.
Los especialistas advierten que los homicidios de funcionarios municipales reflejan la vulnerabilidad del poder local frente al crimen organizado, especialmente en regiones donde los grupos delictivos buscan controlar presupuestos y estructuras de seguridad municipal.



