A sus 73 años, la icónica actriz Verónica Castro vivió una noche inolvidable durante una fiesta organizada por sus amigos más cercanos para homenajear su trayectoria artística. Rodeada de cariño, música y risas, la estrella volvió a brillar como en sus mejores tiempos.
Durante la celebración, en la que estuvieron presentes figuras como Rocío Banquells, Laura Zapata, Maribel Guardia y Ana de la Reguera, además de su hijo Michel Castro, Verónica sorprendió al público al interpretar “Macumba”, uno de sus éxitos más recordados. “Hace cuántos años no cantaba Macumba… ¿Qué será? Pues por lo menos unos 30”, confesó ante las cámaras de Venga la Alegría.
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Visiblemente emocionada, la también presentadora agradeció el cariño recibido y reconoció que la velada fue totalmente inesperada. “Realmente gocé mucho el día de hoy, ¿para qué le soy mentirosa? Gocé muchísimo, no me lo esperaba”, expresó con una gran sonrisa.
Aunque no estaba previsto que cantara, el ambiente festivo motivó a Verónica a tomar el micrófono. “No había para show ni estábamos organizados para eso, pero se dio”, comentó entre risas.
Michel Castro acompañó a su madre en esta celebración especial, mientras que su hermano, el cantante Cristian Castro, ya le había festejado días antes desde Miami. “Mi hijo me lo traje para acá, y el otro pues está trabajando lejos”, mencionó con afecto.
La actriz también dejó entrever la posibilidad de regresar a la pantalla este año: “Pues algo vamos a hacer. A lo mejor si se nos ocurre a todos, algo se nos va a ocurrir, entonces lo vamos a hacer”, adelantó.
Por su parte, Michel descartó por ahora una bioserie sobre la vida de su madre, aunque no cerró la puerta a futuros proyectos, especialmente con el cineasta Manolo Caro, con quien Verónica trabajó en La casa de las flores. “Sé lo dedicado que es. Si alguien se empapa de cuando quiere contar una historia, es él”, destacó el cineasta.
Con su carisma intacto y el respaldo de sus colegas y fans, Verónica Castro demuestra que el brillo de las grandes estrellas no se apaga con el tiempo: simplemente evoluciona.
