Hollywood.- La salud de Bruce Willis y su impresionante fortuna estimada en 250 millones de dólares han empezado a generar tensiones familiares, en especial entre su esposa Emma Heming y las hijas mayores que tuvo con Demi Moore: Rumer, Scout y Tallulah.
Desde que se dio a conocer el diagnóstico de afasia y posteriormente de demencia frontotemporal del actor, Emma Heming ha asumido la responsabilidad de sus cuidados médicos y la administración de sus finanzas. Fuentes cercanas señalan que, aunque públicamente se mantiene una imagen de unidad, en privado las decisiones sobre el destino de la herencia parecen generar fricciones entre los miembros de la familia.
Expertos en patrimonio señalan que la gestión de la fortuna de Willis debe equilibrar la atención médica del actor y la protección del futuro de todas sus hijas. La situación se vuelve aún más delicada tras recordar declaraciones pasadas de Heming, quien mencionó que antes del diagnóstico había considerado el divorcio debido a la distancia emocional de Willis, un malentendido que ahora se atribuye a su enfermedad.
Hasta el momento, ninguna de las partes involucradas ha emitido comentarios públicos sobre la situación, aunque se espera que en los próximos días algún miembro de la familia se pronuncie sobre los rumores que circulan sobre la herencia del actor.



