Comedy Central decidió retirar de su programación el episodio “Got a Nut” de South Park luego del asesinato del activista conservador Charlie Kirk, ocurrido el 10 de septiembre en un evento sobre violencia armada en Utah Valley University.
El episodio, estrenado el pasado 6 de agosto como parte de la temporada 27, presentaba a los personajes Eric Cartman y Clyde Donovan ridiculizando a Kirk, quien era parodiado como un podcaster de derecha con gestos y expresiones similares al activista. La trama incluía una ficticia premiación llamada “Charlie Kirk Award for Young Masterdebaters”, una burla directa a su estilo provocador en debates públicos.
Aunque el propio Kirk había reaccionado con humor al episodio, llamándolo “un honor” y usando una imagen de Cartman como foto de perfil en YouTube, su asesinato generó controversia. Algunos seguidores del movimiento MAGA señalaron a la serie de fomentar el odio político, mientras otros defendieron su carácter meramente satírico.

Kirk, fundador de Turning Point USA y figura cercana a Donald Trump, era una voz fuerte en defensa del derecho a portar armas. Fue asesinado mientras participaba en una sesión de preguntas con estudiantes. El atacante logró escapar por la azotea del recinto, y hasta el momento no ha sido detenido.
Comedy Central no ha emitido un comunicado oficial, pero fuentes de producción confirmaron que la decisión de suspender el episodio fue preventiva, una práctica común en la industria cuando el contenido coincide con hechos sensibles. En su lugar, se transmitió el capítulo “Sermon on the Mount”. No obstante, “Got a Nut” permanece disponible en Paramount+, lo que indica que la medida es temporal.
Creada en 1997 por Trey Parker y Matt Stone, South Park es conocida por su irreverencia y crítica social sin filtros. La serie ha abordado temas controversiales como religión, política y pandemias a lo largo de sus 27 temporadas, manteniéndose como un fenómeno cultural y televisivo.
Este caso reabre el debate sobre la libertad de expresión, los límites del humor y la responsabilidad de los medios en contextos de alta polarización política. Mientras algunos exigen mesura, otros defienden el rol de la sátira como herramienta de crítica necesaria, incluso en tiempos de tragedia.



