Una investigación de la Fiscalía General de la República (FGR) ha revelado los detalles de una presunta red de “huachicol fiscal” que operaba en las costas de Tamaulipas, transportando diésel ilegal en buques que, en los documentos, se registraban como aditivos. Las sospechas surgieron de los propios operadores de las pipas que notaban que el producto “olía a diésel, no a aditivo”.
Operación de la red y principales implicados
La FGR ha detenido a diversas personas, entre ellas el vicealmirante de la Secretaría de la Marina (Semar), Manuel Roberto “N”, señalado como uno de los líderes de la estructura criminal. Se le acusa de autorizar perfiles clave para la operación ilícita.
La investigación apunta a que la red funcionaba mediante una coordinación de distintos niveles de mando:
- Manuel Roberto “N” y Climaco “N” dirigían la operación y designaban a funcionarios.
- Humberto “N” presuntamente colocaba a perfiles en las aduanas para simular la revisión de los buques.
- Sergio “N”, Carlos “N” y Fernando “N” supuestamente simulaban las revisiones y recibían sobornos.
- Indira “N” y Perla “N” presuntamente falsificaban la vigilancia y la documentación administrativa.
- Ismael “N”, verificador de muestras, tenía conocimiento de que los buques transportaban diésel.
Según el testimonio de un colaborador, los buques arribaban al puerto de Tamaulipas con 290 a 300 pipas para la descarga del diésel. Tras cada entrega, se dispersaba dinero a los participantes, con montos de hasta 50,000 pesos por envío, evidenciando una estructura delictiva con operaciones estratégicas.
Testimonios clave y evidencias
La investigación se fortaleció gracias a varios testimonios, incluido el del testigo colaborador “Santo”, quien detalló que esta actividad ilícita ha estado en curso desde 2023. Además, un manuscrito de Fernando Rubén Guerrero, marino asesinado en noviembre de 2024 en Manzanillo, Colima, ha proporcionado información detallada sobre las operaciones de la red, lo que sugiere la alta peligrosidad del grupo.
La FGR también cuenta con la colaboración de otras dos personas, identificadas como “JH” y “HRV”, cuyas declaraciones coincidieron en tiempo y lugar, proporcionando datos cruciales como cámaras de seguridad y equipos de cómputo. “JHR” fue clave al revelar que los barcos no eran registrados en el sistema al llegar, lo que robusteció la investigación.
Hasta el momento, 10 personas han sido vinculadas a proceso, pero aún hay órdenes de aprehensión pendientes por cumplimentar. El caso es de interés nacional debido al elevado perfil de los implicados, el daño al erario y la colusión entre autoridades y empresarios.



