En un hecho sin precedentes, los titulares de palcos y butacas preferentes del Estadio Banorte —antes Estadio Azteca— podrán asistir sin costo a los partidos del Mundial 2026 que se celebren en el inmueble, incluido el partido inaugural del torneo. Así lo confirmó Félix Aguirre, director general del estadio, en entrevista exclusiva con Ciro Gómez Leyva.
“Es oficial. Los dueños de palcos podrán entrar sin costo a los partidos del Mundial. Fue un acuerdo sin igual con FIFA, porque México es el único país con un estadio que tiene este tipo de contratos a largo plazo”, explicó Aguirre.
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El compromiso entre la administración del estadio y FIFA surge tras meses de controversia, ya que la federación internacional exige el control absoluto de los inmuebles durante la Copa del Mundo, incluyendo palcos y plateas. Sin embargo, los propietarios mexicanos cuentan con contratos vigentes que les garantizan el acceso, algunos con vigencia de hasta 99 años.
Roberto Ruano, vicepresidente de la Asociación de Palcos y Plateas, respaldó el acuerdo: “Sigo confiando en su palabra, aunque mis afiliados ya están desesperados porque ha pasado más de un año desde que iniciamos este proceso. Pero estoy seguro de que prevalecerá el estado de derecho”.
El estadio asumirá el costo económico ante FIFA por el acceso de los más de 12,500 lugares ocupados por titulares de palcos. Aunque no podrán entrar con sus credenciales habituales, sí se les proporcionarán boletos oficiales. También deberán cumplir con las medidas de seguridad y lineamientos emitidos para el evento.
Cabe destacar que el público general que desee adquirir entradas en esas zonas deberá pagar precios elevados, que podrían superar los 1,200 dólares por partido, dependiendo de la etapa y el rival.
El Estadio Banorte cuenta con 330 palcos distribuidos en tres niveles, con capacidad de 12 a 20 personas cada uno. Durante el Mundial 2026, será sede de cinco partidos: tres de fase de grupos, uno de octavos de final y uno de cuartos de final. El calendario oficial se dará a conocer en diciembre de 2025.
Finalmente, Aguirre advirtió que si no se respeta lo pactado, se hará público ante medios internacionales: “Saldríamos ante la prensa mundial diciendo que en México no se sigue la ley, y eso es lo que queremos evitar”.
Este acuerdo marca un precedente en la relación entre derechos privados y organismos internacionales como FIFA, y confirma a México como el único país sede que logró preservar legalmente los derechos adquiridos por sus aficionados.
