El delantero uruguayo del Inter Miami CF, Luis Suárez, volvió a estar en el centro de la polémica luego de escupir a un asistente de los Seattle Sounders SC al término de la final de la Leagues Cup 2025, en la que el conjunto de Lionel Messi cayó por un contundente 3-0.
Tras el silbatazo final, que consagró a Seattle como campeón, se desató una trifulca entre jugadores y cuerpo técnico de ambos equipos, con empujones y manotazos. Sin embargo, el episodio que acaparó la atención mundial fue el escupitajo de Suárez, un gesto que podría costarle una sanción disciplinaria.
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El técnico de los Sounders, Brian Schmetzer, lamentó que el incidente eclipsara la actuación de su equipo:
“Desafortunadamente, eso va a desviar la atención de la gran actuación de Seattle. Sus jugadores estaban frustrados y eso provocó que ocurrieran cosas en la cancha que no deberían haber sucedido. La historia debería ser lo que hicimos en el partido, no lo que pasó después”.
Un historial de conductas polémicas
El accionar de Suárez no sorprende en el panorama futbolístico, ya que a lo largo de su carrera ha acumulado varios antecedentes disciplinarios:
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2010 (Ajax): mordió a Otman Bakkal y recibió 7 partidos de suspensión.
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2011 (Liverpool): fue sancionado con 8 juegos por insultos racistas contra Patrice Evra.
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2013 (Liverpool): mordió al defensor Branislav Ivanovic, lo que le costó 10 partidos.
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Mundial 2014 (Uruguay): mordió al italiano Giorgio Chiellini, recibiendo una sanción de 9 partidos internacionales y 4 meses fuera de las canchas.
El nuevo incidente coloca nuevamente al uruguayo bajo la lupa y genera interrogantes sobre una posible sanción en el marco de la Leagues Cup, empañando así el título histórico de Seattle Sounders.
