Ciudad de México.– La presidenta de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, confirmó que el salario mínimo en México registrará un incremento a partir del 1 de enero de 2026, consolidándose como una de las políticas económicas más destacadas del gobierno federal.
De acuerdo con la Comisión Nacional de Salarios Mínimos (Conasami), el aumento ha sido clave en la reducción de la pobreza en el país. Entre 2018 y 2024, la población en pobreza pasó de 41.9% a 29.6%, y de los 13.4 millones de personas que lograron superar esta condición, 6.64 millones lo hicieron gracias a los incrementos salariales. Durante este periodo, el salario mínimo diario pasó de 88.40 pesos a 248.90 pesos, un crecimiento real acumulado de 116.4%.
Meta salarial para 2026
El objetivo planteado por Sheinbaum es que el salario mínimo alcance el valor de dos canastas básicas ampliadas, lo que representaría un monto mensual de 9,437.10 pesos, equivalente a 314.60 pesos diarios. Actualmente, la canasta básica ampliada urbana tiene un valor de 4,718.55 pesos, por lo que el aumento proyectado respecto a 2025 sería de 11.3%.
La meta sexenal es mantener incrementos salariales de alrededor de 12% en promedio, siempre que la inflación se mantenga dentro del rango definido por el Banco de México.
Inflación y contexto económico
La inflación ha mostrado señales de control, con una variación anual de 3.51% en julio, el nivel más bajo desde finales de 2020. Analistas proyectan que para 2025 la inflación cierre en 4.05%, lo que favorece cumplir con los incrementos salariales sin generar desajustes económicos graves.
Proyección para 2030
A largo plazo, la meta es que el salario mínimo cubra 2.5 canastas básicas en 2030, lo que equivaldría a 11,796.40 pesos mensuales o 393.20 pesos diarios. La Conasami continuará con el diálogo tripartito para garantizar incrementos sostenibles y alcanzar este objetivo.
Desafíos futuros
Especialistas advierten que los incrementos salariales pueden afectar los costos laborales, la inflación y el empleo, sobre todo en pequeñas empresas. El reto del gobierno será mantener un equilibrio entre la mejora del poder adquisitivo y la estabilidad económica del país.



