HERMOSILLO, SONORA.— El exboxeador mexicano Julio César Chávez Jr. enfrenta una de las etapas más complejas de su vida personal y profesional, luego de que un juez federal dictara prisión preventiva en su contra este 20 de agosto de 2025, a petición de la Fiscalía General de la República (FGR), quien lo acusa de presuntos vínculos con el Cártel de Sinaloa.
Durante la audiencia, el juez de control Enrique Hernández determinó que la medida era necesaria para evitar su posible fuga y garantizar el correcto desarrollo de la investigación. Chávez Jr. fue trasladado de inmediato a un penal federal en Sonora, donde permanecerá recluido mientras se define su situación jurídica.
Según los señalamientos de la FGR, el excampeón estaría involucrado en delitos relacionados con delincuencia organizada, tráfico de armas, explosivos y municiones. De ser hallado culpable, podría enfrentar penas severas que pondrían fin definitivo a su carrera en el deporte.

Su detención fue resultado de una operación binacional entre autoridades mexicanas y estadounidenses, tras su deportación desde Estados Unidos. Incluso, el embajador de ese país en México compartió una fotografía del momento de la entrega del detenido a mandos mexicanos, destacando la cooperación entre ambas naciones.
La defensa del pugilista solicitó la ampliación del plazo constitucional para reunir pruebas de descargo, por lo que la audiencia de vinculación a proceso fue agendada para el sábado 23 de agosto a las 5:00 de la tarde.
El caso ha generado gran conmoción en el ámbito deportivo y mediático, debido a la relevancia del apellido Chávez en el boxeo mexicano. Mientras tanto, las autoridades continúan con las investigaciones y la familia Chávez enfrenta un nuevo golpe ante las complicadas circunstancias legales de Julio César Jr.



