Australia.– A un año del ataque contra un bebé en Hanlon Park, autoridades australianas informaron que el presunto responsable huyó a China, donde permanece fuera del alcance de la justicia debido a la negativa del gobierno chino a extraditar a sus ciudadanos.
El caso ocurrió en 2024 y causó gran indignación luego de que se difundiera un video en redes sociales donde se observa al hombre acercarse a una madre con su hijo y verter café hirviendo sobre el cuerpo del menor, identificado como Luka. El ataque le ocasionó lesiones graves y generó un debate nacional sobre la seguridad en espacios públicos.
Tras las investigaciones, se reveló que el agresor era un migrante de origen chino que habría actuado en un arranque de ira tras recibir la negativa a su solicitud de visa para permanecer en Australia. Después del ataque huyó a su país natal, donde se ocultó de las autoridades australianas.
El delito por el que es requerido corresponde a lesiones corporales graves, que en la legislación australiana implicaría una condena de hasta cadena perpetua. Sin embargo, el gobierno chino se ha amparado en su legislación nacional, que impide la extradición de ciudadanos a otros países.
Un comisionado de la Policía de Queensland señaló que las investigaciones continúan abiertas:
“Esto no es algo que hayamos dejado de lado; fue una infracción muy grave y estamos trabajando con nuestros socios internacionales para avanzar en este asunto y llegar a una solución”, declaró a medios locales.
Pese a los esfuerzos diplomáticos de Australia, la posición de Pekín complica que el sospechoso sea juzgado fuera de su territorio. De momento, las conversaciones entre ambos gobiernos permanecen en curso, sin que se haya alcanzado un acuerdo.



