Washington, D.C.— El gobierno de Estados Unidos ha confiscado más de 700 millones de dólares en activos vinculados al presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, a quien acusa de liderar el Cártel de los Soles, organización declarada como terrorista por la administración de Donald Trump en julio pasado.
La fiscal general de Estados Unidos, Pam Bondi, destacó en entrevista que los bienes confiscados incluyen dos aviones de lujo, varias residencias, una mansión en República Dominicana, propiedades en Florida, una granja de caballos, nueve vehículos, así como millones de dólares en joyas y efectivo. Bondi calificó estas acciones como parte de la lucha contra el crimen organizado, señalando que, pese a la confiscación, “el régimen de terror continúa”.
En agosto, la fiscal anunció un incremento de la recompensa de 25 a 50 millones de dólares por información que conduzca al arresto de Maduro. La acusación contra el mandatario venezolano se remonta a 2020, cuando Estados Unidos lo vinculó con narcotráfico y terrorismo, señalando que el Cártel de los Soles está liderado por Maduro y altos funcionarios militares de su gobierno.
Por su parte, el ministro de Interior y Justicia de Venezuela, Diosdado Cabello, rechazó las acusaciones y afirmó que el Cártel de los Soles es un “invento” de Estados Unidos. La vicepresidenta ejecutiva de Venezuela, Delcy Rodríguez, llamó a la unión de los países latinoamericanos ante lo que consideró amenazas de intervención militar por parte de Estados Unidos.
Estados Unidos reconoce como presidente electo de Venezuela al opositor Edmundo González Urrutia, representante de la Plataforma Unitaria Democrática (PUD).



