En redes sociales se volvió tendencia un caso de una niña de tres años que sufrió una convulsión en el área de juegos de su escuela en el estado de Querétaro, sin que el personal educativo de la institución actuara adecuadamente ni le notificara a la familia sobre lo sucedido. El hecho fue registrado en video.
La usuaria de Facebook, identificada como Vale Rebollar, madre de la menor, denunció públicamente lo ocurrido el pasado viernes 6 de diciembre en la escuela Smart Kids Preescolar, ubicada en la colonia La Joya, en Santiago de Querétaro. Desde su cuenta, la mujer explicó que fue hasta que su hermano acudió por su hija y la trasladaron a un centro médico cuando se dieron cuenta de los ataques.
Cuando el tío de la estudiante fue por ella, las educadoras no informaron que la pequeña había comenzado a convulsionar hacía un tiempo y simplemente la entregaron a su familiar en brazos. Ante esta situación, la madre señaló al personal de la escuela por supuesta negligencia y exigió que se investigaran los hechos.
“El día de hoy levanto la voz, para que el día de mañana mi hija o cualquier otro niño no pasen por una situación similar. Gracias a mi hermano y a los médicos, el día de hoy mi hija está con nosotros. Pido a las autoridades competentes que se haga justicia y apliquen las sanciones correspondientes a este colegio y a sus administradores”, publicó Rebollar en Facebook.
¿Cómo ocurrieron los hechos?
A través de su perfil en la red social, la madre narró que el pasado viernes 6 de diciembre, su hija acudió al preescolar como cualquier otro día. A la hora de la salida, cuando el hermano de la mujer fue a recogerla, el personal de la institución educativa se demoró en entregarla.
Posteriormente, las maestras salieron con la menor y la entregaron en brazos, argumentando que la pequeña “estaba algo seria”. Sin embargo, a los pocos minutos, el joven se dio cuenta de que su sobrina no emitía sonido alguno y estaba aplicando mucha fuerza con la quijada hasta que dejó de responder.
Ante esta situación, el tío comenzó a golpear la puerta del instituto para pedir ayuda, pero al no recibir respuesta, fue auxiliado por un taxista de aplicación, quien los llevó al centro de salud más cercano. Allí, el personal médico la reanimó e informó a la familia que la niña ya había estado presentando convulsiones por un tiempo.
Al conocer el diagnóstico de los médicos, la madre de la estudiante solicitó las grabaciones de las cámaras de seguridad y, gracias a ello, pudo confirmar que su hija comenzó a convulsionar desde que estaba en el área de juegos, sin que el personal docente hiciera algo al respecto ni informara a la familia.
¿Qué hacer si un menor se convulsiona?
De acuerdo con la página HealthyChildren, las convulsiones son causadas por sobrecargas en la actividad eléctrica del cerebro y pueden hacer que un menor se caiga, tiemble o se contorsione violentamente. Incluso, puede perder súbitamente la capacidad de reacción durante un episodio, quedando en trance.
Las medidas a tomar si un niño tiene una convulsión son las siguientes:
-Si no está seguro de que se trate de una convulsión, tóquelo suavemente y llámelo por su nombre en voz alta para intentar captar su atención.
-Permanezca junto al niño, ¡no lo deje solo!
-Acuéstelo sobre el piso y póngalo de lado. Esto evitará que se asfixie si llega a vomitar.
-Asegúrese de que no haya objetos peligrosos cerca. NO intente restringir ni sujetar al niño durante la convulsión.
-NO le ponga nada en la boca, ni un trapo ni un calcetín. Muchos niños aprietan los dientes durante una convulsión, por lo que podría morderse o lastimarse.
-Mire el reloj. Intente medir el tiempo que dura el ataque.
-Llame a los servicios de emergencia o lleve al niño a un centro médico para que reciba atención por parte de un equipo profesional.
Quinto Poder
J.M.