La noche del 9 de noviembre, el bar Los Cantaritos, ubicado en pleno centro de la ciudad de Querétaro, fue escenario de un ataque armado que estaba dirigido contra un presunto integrante del crimen organizado.
“Iban por una persona”, fue la breve declaración que la presidenta Claudia Sheinbaum ofreció respecto a los hechos en su mañanera del día 11.
En pocos segundos, cuatro sujetos arribaron al establecimiento, amagaron al personal de seguridad, ingresaron al lugar, descargaron varias ráfagas de disparos contra los presentes y huyeron sin complicación alguna.
Juan Luis Ferrusca, secretario de Seguridad Pública del municipio de Querétaro, explicó en un primer informe oficial que la masacre fue perpetrada con armas largas. Durante el violento episodio fueron asesinadas 10 personas, identificadas como:
Rodrigo García
Giovanni Arellano
Diego Tapia
Carlos Gómez
Jesús Alberto Arteaga
Fátima Ramos
Berenice López
Angie Ascencio
Arturo Velazco
Fernando González Núñez
Las identidades de las víctimas fueron dadas a conocer en plataformas digitales por el medio Emergente Querétaro a manera de homenaje.
Según fuentes citadas por Milenio, Fernando González Núñez era conocido con el alias de ‘La Flaca’. Presumiblemente, había compartido en redes sociales varias fotografías y publicaciones que sugerían su posible vinculación al Cártel de Jalisco Nueva Generación (CJNG).
La información compartida por Rubén Mosso y Estrella Álvarez señala que ‘La Flaca’ estaba relacionado con actividades de huachicoleo en Querétaro y en el pasado mes de agosto habría lanzado una oferta en redes sociales para reclutar sicarios. Hasta la mañana del 11 de noviembre, la Fiscalía General del Estado (FGE) no ha brindado un comunicado público referente a estos datos.
En su cuenta oficial de X, el alcalde Felipe Fernando Macías calificó este suceso como un “ataque dirigido a delincuentes” y aseguró que “es derivado de la violencia que se vive a nivel nacional”.
Por su parte, el gobernador del estado, Mauricio Kuri González, informó el inicio de acciones de coordinación con Omar García Harfuch (secretario de Seguridad y Protección Ciudadana Federal) para esclarecer lo ocurrido. “Reitero mi llamado para despolitizar el tema de la inseguridad y emprender una genuina cooperación en beneficio de México”, escribió en un mensaje en la misma red social.
Después del ataque, los agresores abandonaron e incendiaron su camioneta en el municipio de El Marqués. Posteriormente, autoridades estatales y federales confirmaron la detención de una persona por su aparente relación con este suceso, aunque no brindaron ningún detalle sobre su identidad.
Al mediodía del 11 de noviembre, el secretario de Gobierno estatal, Carlos Alcaraz, especificó que 13 personas tuvieron que ser hospitalizadas debido a las lesiones que sufrieron por el ataque. Del total, siete son mujeres, cinco son hombres y una última persona solicitó que no se revelaran detalles sobre su identidad ni condición de salud. Acorde con el secretario, las y los heridos se encuentran estables.