Desde el Salón de la Tesorería de Palacio Nacional, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador (AMLO), insistió en que, el proyecto que encabeza busca reformar al Poder Judicial con el único fin de que sea el pueblo de México el que elija a los que imparten justicia, hecho que después resaltó, ayudaría a quitarle poder a la delincuencia organizada e incluso, a los delincuentes “de cuello blanco”.
“Lo único que se está planteando, que se está proponiendo, es que lo elija el pueblo; al juez, al magistrado, al ministro, exclamó.
Ante los integrantes de la prensa mexicana, el fundador de Movimiento Regeneración Nacional (Morena) recordó que el Poder Judicial, podría estar controlado, al tiempo que a su vez también se puede presentar una manipulación de las elecciones, lo que lo llevó a insistir en que los delincuentes “pueden tener el control”; sin embargo, mientras daba su explicación, lanzó la reflexión:
“Yo digo que, ¿ahora no lo tienen?”.
Objetivo es servir al pueblo
A decir del mandatario federal, esta reforma planteada por él y secundada por quienes forman parte del mismo proyecto de transformación -y la que basta hacer mención, ha causado tanto incertidumbre en los mercados como en la sociedad civil-, es hacer que el Poder Judicial se mantenga al servicio el pueblo de México y no beneficiar a los delincuentes.
“Lo que queremos es quitarles a los delincuentes un poder que tiene que estar al servicio del pueblo, impartiendo justicia que no, en muchos casos, las resoluciones tienen que ver con los intereses de la delincuencia organizada, de la delincuencia de cuello blanco y, ¿cómo se enfrenta eso?, ¿cómo se purifica la vida pública? Con el método democrático”, insistió.