E.E.U.U.- En una decisión estratégica para proteger al sector agropecuario, el gobierno de Estados Unidos anunció un paquete de 12 mil millones de dólares destinado a los agricultores afectados por el aumento en los costos de insumos, la baja de precios en los mercados globales y las secuelas de la guerra comercial.
De acuerdo con el presidente Donald Trump, 11 mil millones se canalizarán directamente a los productores de granos básicos como maíz, soya, algodón, trigo, sorgo y arroz, mientras que mil millones más se reservarán para quienes cultivan frutas, verduras y otros productos, cuyos lineamientos específicos serán publicados próximamente.
El programa funcionará como un “puente de liquidez”, diseñado para compensar el encarecimiento de semillas, fertilizantes y maquinaria agrícola, además de las pérdidas de ingreso derivadas de mercados deprimidos.
Junto al respaldo financiero, el plan contempla una reducción en regulaciones ambientales que afectan a la maquinaria agrícola, con la intención de que fabricantes como John Deere bajen precios y faciliten el acceso a equipos más modernos y asequibles para el campo.
Autoridades del Departamento de Agricultura explicaron que esta combinación de transferencias directas y ajustes regulatorios busca aliviar la presión económica sobre los productores, mientras se refuerza la competitividad del sector frente a escenarios adversos.
Este nuevo paquete se suma a una política constante desde 2017, año en que el campo estadounidense ha recibido más de 23 mil millones de dólares en apoyos relacionados con medidas comerciales. Expertos de la Universidad de Missouri advierten que, sin este tipo de programas, el ingreso neto agrícola podría desplomarse hasta 30 mil millones de dólares en 2026.
Finalmente, el Grupo Consultor de Mercados Agrícolas (GCMA) señaló que este anuncio deja claro que no se trata de una medida partidista, sino de una política pública estructural para proteger al corazón productivo del país ante escenarios de incertidumbre y pérdida de rentabilidad.



