MOSCÚ / BISHKEK.– El presidente ruso Vladimir Putin afirmó que Rusia está dispuesta a frenar la guerra en Ucrania, pero únicamente si las fuerzas ucranianas se retiran de los territorios que actualmente controlan. De no hacerlo, aseguró que continuarán con las operaciones militares para recuperarlos por la vía armada.
Las declaraciones se dieron después de una cumbre en Bishkek con líderes de exrepúblicas soviéticas, donde Putin abordó las recientes conversaciones entre Estados Unidos y Ucrania respecto a un borrador de paz. Según el mandatario ruso, dicho documento —de 28 puntos— podría servir como base para futuros acuerdos.
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“Las tropas ucranianas deben retirarse de los territorios que controlan, y entonces cesará la lucha. Si no se van, lo lograremos por la vía armada. Eso es todo”, advirtió Putin.
Propuesta de paz y tensiones diplomáticas
La semana pasada se filtró un plan negociado por Washington y Kiev, que causó preocupación entre algunos países europeos al considerar que cedía ante exigencias clave de Moscú, como mantener el control de parte del territorio ucraniano y limitar al ejército de Ucrania. Después de esto, las naciones europeas presentaron una contraoferta y durante las conversaciones en Ginebra se informó sobre un “marco de paz refinado”.
Putin señaló que Estados Unidos y Ucrania dividieron los 28 puntos en cuatro bloques para su revisión, y que una copia de esa propuesta ya se envió a Rusia.
Desconfianza hacia Kiev
El presidente ruso subrayó que considera ilegítimo al gobierno ucraniano, por lo que sería legalmente imposible firmar un acuerdo directo con Kiev. En ese sentido, recalcó que cualquier pacto necesita reconocimiento internacional y que se validen los avances rusos en territorio ucraniano.
En la actualidad, las fuerzas rusas controlan más del 19 por ciento de Ucrania, y en 2025 han registrado su avance más rápido desde 2022, según datos y mapas de origen proucraniano.
Putin también señaló que la península de Crimea y la región del Donbás podrían discutirse directamente con Estados Unidos. Está previsto que Steve Witkoff, enviado especial del presidente Donald Trump, viaje a Moscú la próxima semana.
