Ciudad de México.– La compañía española Telefónica, propietaria de la marca Movistar, anunció oficialmente su salida del mercado mexicano como parte de su nuevo plan estratégico 2026-2029, con el que busca concentrar sus operaciones en sus principales mercados: España, Reino Unido, Alemania y Brasil.
El anuncio fue realizado por Marc Murtra, presidente del grupo Telefónica, durante una conferencia de prensa en la que también confirmó el retiro de la empresa de Chile y Venezuela, mientras que en Colombia la operación aún se mantiene sujeta a condiciones de cierre antes de concretarse.
“Esta decisión forma parte de nuestra visión de futuro. Telefónica se enfocará en fortalecer sus mercados más rentables y estratégicos”, explicó Murtra.
Aunque no se precisó una fecha exacta para el cese de operaciones en México, el ejecutivo señaló que el proceso dependerá de las negociaciones con posibles compradores interesados en adquirir las operaciones locales.
Impacto en los usuarios y transición de servicios
Hasta el momento, no se ha emitido información oficial sobre cómo se realizará la transición de los millones de usuarios de Movistar en México. Sin embargo, fuentes del sector de telecomunicaciones indicaron que Telefónica mantiene conversaciones con Beyond ONE, empresa propietaria de Virgin Mobile México, para la posible venta de su negocio móvil.
De concretarse la operación, los usuarios podrían conservar sus líneas y servicios mediante una migración gradual hacia Virgin Mobile, siguiendo un modelo similar al implementado en otros países donde Movistar ha cesado operaciones.
Telefónica aseguró que, por ahora, no habrá afectaciones al servicio, por lo que los clientes podrán continuar utilizando sus líneas y planes de datos con normalidad hasta nuevo aviso.
Contexto y razones de la salida
Telefónica México inició operaciones en 2001, consolidándose como el segundo operador móvil del país durante gran parte de dos décadas, en competencia directa con Telcel y AT&T. No obstante, su participación de mercado ha disminuido en los últimos años, en parte debido al acuerdo de renta de infraestructura con AT&T, que limitó su independencia operativa.
La decisión de abandonar México coincide con la publicación de sus resultados financieros hasta septiembre de 2025, en los que la compañía registró una de las caídas más pronunciadas del Ibex 35 —el principal índice bursátil de España— en los últimos cinco años.
El nuevo plan busca reducir costos, optimizar recursos y reforzar su presencia internacional en regiones con mayor rentabilidad y menor competencia regulatoria.
Reacción de autoridades
Hasta el momento, el Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT) y otras autoridades mexicanas no han emitido un pronunciamiento oficial sobre el proceso de salida ni sobre las medidas que se tomarán para garantizar los derechos de los consumidores.
Telefónica recomendó a los usuarios mantenerse atentos a los comunicados oficiales sobre posibles cambios de marca, ajustes en los servicios o procesos de transición.



