Tokio, Japón.- Tokio se convirtió este lunes en la segunda parada de la gira asiática del presidente Donald Trump, quien fue recibido por el emperador Naruhito en el Palacio Imperial. El encuentro tuvo un carácter diplomático y simbólico, en el marco de una renovada relación bilateral liderada por la nueva primera ministra de Japón, Sanae Takaichi.
Previo a su llegada al palacio, Trump recorrió en helicóptero el cielo de Tokio, donde diversas torres se iluminaron con los colores de la bandera estadounidense. Al descender, saludó con entusiasmo al emperador con un “Hola, qué bueno verte”, y posteriormente lo describió como “un gran hombre” ante los medios.
La Casa Blanca compartió una fotografía del encuentro en su cuenta oficial de X, con el mensaje: “Segunda parada: Japón. El presidente Donald J. Trump se reúne con el emperador Naruhito en el Palacio Imperial de Tokio”.
Second stop: Japan. President Donald J. Trump meets with Emperor Naruhito at the Imperial Palace in Tokyo. 🇺🇸🇯🇵 pic.twitter.com/ckA1cKumy8
— The White House (@WhiteHouse) October 27, 2025
Inversión histórica y acuerdos clave
Durante su visita, Trump consiguió una promesa de inversión por 550 mil millones de dólares por parte del gobierno japonés, a cambio de una pausa en los aranceles a la importación. Se trata de un avance significativo en la relación económica bilateral.
El secretario de Comercio de EE.UU., Howard Lutnick, y su homólogo japonés, Ryosei Akazawa, conversaron sobre nuevas oportunidades, destacando el sector de redes eléctricas como un campo estratégico para futuras inversiones.
Expectativas con la primera ministra Takaichi
Sanae Takaichi, quien asumió como primera ministra apenas la semana pasada, planea impresionar a Trump con nuevos acuerdos de importación de productos estadounidenses como camionetas, soya y gas, además de anunciar un proyecto conjunto en construcción naval.
En una llamada previa, Takaichi aseguró que su prioridad es fortalecer la alianza entre Japón y EE.UU. Trump, por su parte, elogió a la mandataria japonesa, a quien describió como una aliada cercana de su fallecido amigo y exprimer ministro Shinzo Abe: “Creo que va a ser genial”, afirmó.



