Pachuca, Hgo. — Tigres logró una agónica victoria 2-1 sobre Pachuca en un partido vibrante, de ida y vuelta, que tuvo goles, polémica arbitral, revisiones del VAR y un cierre cargado de tensión en el Estadio Hidalgo.
El encuentro comenzó con dominio alternado, aunque ninguno logró romper el cero durante los primeros 45 minutos. Pachuca insistió con Enner Valencia y Kenedy como ejes ofensivos, pero Nahuel Guzmán mantuvo su arco en cero con intervenciones claves, incluida una salida que lo dejó tendido en el césped al minuto 37. Tigres, por su parte, apostó por la velocidad de Lainez y Correa, quien incluso estrelló un disparo en el poste antes del descanso.
En la segunda mitad, la intensidad subió de tono. Al minuto 59, Juan Brunetta abrió el marcador con un impecable cobro de tiro libre que dejó sin oportunidad al arquero Carlos Moreno. El tanto desató la reacción de los Tuzos, que empataron al 77’ gracias a un zurdazo de Kenedy desde fuera del área, imposible para Guzmán.
Sin embargo, la alegría hidalguense duró poco. Un minuto más tarde, Diego Lainez aprovechó un largo pase de Rômulo para definir con precisión y devolver la ventaja a los felinos.
El cierre fue frenético: Marco Farfán fue expulsado al 85’, aunque el VAR anuló la roja minutos después. Pachuca se volcó al ataque, generando varias llegadas peligrosas con Illian Hernández y Togni, pero Guzmán respondió con reflejos felinos para mantener el triunfo.
El árbitro añadió 10 minutos de compensación, tiempo en el que los Tuzos encerraron a Tigres en su área, pero no lograron romper el cerrojo defensivo. La expulsión de Eduardo Bauermann al 90’ terminó por sepultar las esperanzas locales.
Con esta victoria, Tigres se consolida entre los primeros lugares del torneo, mientras que Pachuca sufre un duro golpe en casa y complica su paso hacia la liguilla.



