La decisión del gobierno mexicano de aplicar aranceles de hasta 50 por ciento a la importación de vehículos provenientes de China busca poner fin a la guerra de precios que estas marcas han provocado en el mercado nacional, además de proteger empleos e incentivar la inversión local.
De acuerdo con Erick Ramírez, director de la firma Urban Science, esta medida reconoce la existencia de precios artificialmente bajos que han alimentado prácticas depredadoras. “Lo positivo es que al subir el costo de comercialización en México, se incentivará la inversión local. Aunque es probable que las automotrices chinas no aumenten de inmediato el precio de sus unidades, sí puede haber especulación y un adelanto de compras antes de que la medida se implemente en 2026”, señaló.
Ramírez advirtió que este comportamiento podría generar distorsiones en el mercado, afectando tanto a los autos nuevos como a los usados. No obstante, consideró que la medida abre la puerta para que las marcas extranjeras que buscan permanecer en México concreten sus anuncios de inversión.
Impacto en el mercado automotriz
Por su parte, Guillermo Rosales, presidente ejecutivo de la Asociación Mexicana de Distribuidores de Automotores (AMDA), reconoció que el incremento al arancel es fuerte y tendrá efectos en los precios de los vehículos importados. Explicó que, conforme se agoten los inventarios actuales de las automotrices chinas y sus distribuidores, será necesario realizar ajustes en los precios.
“Esto ocurriría en una proporción que responda a la capacidad de cada marca para asumir parte del pago del arancel y con ello mantener su oferta competitiva; no se puede anticipar cuál será la respuesta de cada una”, indicó.
En tanto, Gerardo Gómez, director general de la consultora JD Power, reveló que en agosto se vendieron en México 78 mil 294 autos chinos, lo que representa una caída del 11.5 por ciento respecto al mismo periodo de 2024. Dentro de este segmento, el MG5 de la marca MG se mantiene como el modelo más vendido, con 14 mil 521 unidades, aunque también registró una baja del 17 por ciento en comparación con el año pasado.
Perspectivas
La aplicación de este arancel se perfila como un parteaguas para el sector automotriz mexicano. Mientras los especialistas advierten sobre ajustes de precios y posibles especulaciones en el corto plazo, el objetivo principal de la medida es claro: detener la competencia desleal, proteger empleos y abrir espacio para mayores inversiones en la industria nacional.



