Julián Gil se sinceró ante las cámaras del programa Hoy sobre la difícil situación que atraviesa con su hijo Matías, producto de su relación con Marjorie de Sousa. El actor expresó que no ha tenido ningún avance legal y que mantiene la esperanza de que, cuando Matías crezca, sea él quien busque una relación con su padre.
“Mi única esperanza es que él, a medida que vaya creciendo, empiece a reclamar la figura del padre”, dijo con emoción contenida.
El conflicto legal comenzó en 2017 y desde entonces ha sido objeto de atención mediática. Aunque en un inicio Gil buscaba la custodia compartida, los tribunales otorgaron la patria potestad a De Sousa, limitando a Julián a visitas supervisadas, las cuales, según él, también han sido restringidas.
A pesar del distanciamiento con su hijo menor, Julián vive una etapa estable en lo personal. Está por celebrar su primer aniversario de bodas con la periodista deportiva Valeria Marín, con quien mantiene una relación de más de seis años.
“Pensamos en hacer un crucerito con la familia para celebrar ese primer aniversario”, compartió.

Sobre la posibilidad de convertirse en padres, ambos coincidieron en que es un plan que existe, aunque no inmediato. “Gracias a Dios tenemos mucho trabajo, así que nos tomamos nuestro tiempo”, expresó Valeria, a lo que Julián añadió con humor: “Pero el trabajo no nos limita para hacer la asignación”.
Finalmente, el actor respondió a las críticas que recibió tras compartir públicamente que fue víctima de una infidelidad por parte de su ex, la actriz Ximena Duque. Aseguró tener derecho a contar su historia y rechazó los ataques por expresarse como hombre sobre una vivencia real.
Así, Julián Gil refleja la dualidad que enfrenta hoy: la tristeza por la distancia con su hijo y la alegría de una vida en pareja plena, con nuevos proyectos y una familia en construcción.



