Ciudad de México. La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, respondió con firmeza a la orden ejecutiva firmada en secreto por el expresidente estadounidense Donald Trump, la cual autoriza al Pentágono a utilizar fuerza militar directa contra cárteles latinoamericanos considerados como organizaciones terroristas.
Desde Palacio Nacional, Sheinbaum dejó en claro que no existe posibilidad alguna de que fuerzas militares extranjeras operen en suelo mexicano:
“No va a haber invasión. Eso está descartado, absolutamente descartado. No hay riesgo de que vayan a invadir nuestro territorio”, expresó tajante.
La mandataria también explicó que la orden emitida por Trump tiene efecto únicamente dentro del territorio estadounidense, por lo que no representa una amenaza inmediata a la soberanía mexicana.
Además, recordó que las agencias estadounidenses que operan en México están estrictamente reguladas, y que cualquier intento previo de introducir tropas extranjeras ha sido rechazado categóricamente por el gobierno mexicano:
“Cuando lo han llegado a plantear, siempre hemos dicho que no”, afirmó.
La orden ejecutiva fue revelada por The New York Times, y autoriza al ejército estadounidense a realizar operaciones militares fuera de su territorio contra grupos como el Cártel de Sinaloa, CJNG, Cártel del Golfo, Nueva Familia Michoacana, Cárteles Unidos, el Tren de Aragua (Venezuela) y la Mara Salvatrucha (MS-13).
El objetivo declarado por el gobierno estadounidense es frenar el flujo de fentanilo y otras drogas consideradas una amenaza a su seguridad nacional. Según medios, ya se preparan posibles escenarios de incursión en México y Venezuela.
Sin embargo, expertos han advertido que tales acciones podrían violar el derecho internacional y derivar en consecuencias diplomáticas graves. Incluso se ha señalado el riesgo de que Estados Unidos incurra en ejecuciones extrajudiciales si actúa sin autorización del país afectado ni mandato legal internacional.
Finalmente, Sheinbaum reafirmó su compromiso con la defensa de la soberanía nacional y el principio de no intervención. Mientras el discurso estadounidense apuesta por una estrategia militar, México mantiene su postura en favor del diálogo, la cooperación internacional y el respeto mutuo entre naciones.
