Birmingham, Inglaterra – El mundo del rock está de luto. Este jueves se confirmó el fallecimiento de Ozzy Osbourne, ícono del heavy metal y legendario líder de Black Sabbath, a los 76 años de edad.
La familia del músico británico emitió un comunicado en el que pidió privacidad y detalló que Ozzy murió rodeado de sus seres queridos. “Con más tristeza de la que las palabras pueden expresar, tenemos que informar que nuestro querido Ozzy Osbourne falleció esta mañana. Estaba con su familia y rodeado de amor”, dice el mensaje.
En junio pasado, Osbourne ofreció su último concierto en el estadio Villa Park de Birmingham, su ciudad natal, donde compartió escenario con Guns N’ Roses, Metallica y una constelación de estrellas del rock, cerrando su carrera con una emotiva reunión con Black Sabbath.
Durante el evento, el cantante expresó entre lágrimas: “Se está tan bien en este escenario. Los quiero a todos. Gracias desde el fondo de mi corazón”, palabras que hoy resuenan con fuerza entre sus millones de seguidores.
Ozzy, nacido el 3 de diciembre de 1948, deja un legado musical que marcó a generaciones enteras. Su carrera incluye más de 100 millones de discos vendidos, una estrella en el Paseo de la Fama de Hollywood y otra en su natal Birmingham, además de haber fundado el famoso festival Ozzfest.
Con una vida marcada por la música, el caos, las caídas y la redención, Osbourne se consolidó como uno de los íconos más influyentes de la historia del rock.