Ciudad de Sumatra, Indonesia. – Con apenas 11 años, Rayyan Arkan Dikha se convirtió en una sensación global tras viralizarse un video suyo bailando sobre una canoa durante la tradicional regata Pacu Jalur. Vestido con atuendo típico y con gafas de sol, Dikha marcó pasos sencillos pero carismáticos, captando la atención de millones.
Su actuación espontánea se volvió el epicentro del fenómeno conocido como “aura farming”, una tendencia viral que define el carisma con gestos naturales, pulidos y repetibles. El video, compartido originalmente en Instagram por @mythicalreelscroll, alcanzó más de 8 millones de vistas y generó miles de réplicas, incluso por figuras como Travis Kelce o deportistas del PSG.
La tradición local, que pide a un niño animar al equipo de remo con una coreografía única, cobró así una dimensión global. Por su impacto, Rayyan fue reconocido oficialmente como embajador turístico por el gobernador de Riau y recibió una beca de 20 millones de rupias.
Más allá del folclor, su historia demuestra cómo un instante local puede transformarse en símbolo cultural a escala mundial.
