Las Vegas Nevada-El legendario boxeador filipino no colgó definitivamente los guantes. Esta noche, a sus 46 años, vuelve al ring del MGM Grand Garden Arena en Las Vegas con la mira puesta en un nuevo objetivo: el título mundial welter del Consejo Mundial de Boxeo (CMB), actualmente en manos del mexicano Mario Barrios.
La pelea está cargada de simbolismo. Barrios nació apenas cuatro meses después del debut profesional de Pacquiao en enero de 1995. La diferencia generacional de 16 años resume bien el duelo: juventud contra legado.
Pacquiao, miembro del Salón de la Fama del Boxeo desde 2025, ostenta un impresionante récord de 62 victorias, 8 derrotas y 2 empates, con 39 triunfos por nocaut. Barrios llega con marca de 29-2-1, incluyendo 18 victorias por la vía rápida.
Una victoria esta noche no solo le daría a Pacquiao un nuevo cinturón, sino que lo convertiría en el segundo campeón mundial más longevo de la historia del boxeo. Solo Bernard Hopkins lo supera, al coronarse campeón semipesado a los 49 años en 2014. Detrás de ellos están leyendas como George Foreman (45 años), Archie Moore (44), Thulani Malinga (42) y Javier Castillejo (38).
Además del reto deportivo, la pelea representa un atractivo negocio. Pacquiao ganará alrededor de 12.5 millones de dólares solo por presentarse, cifra que podría ascender a 17 o 18 millones con ingresos por pay-per-view, taquilla y patrocinios. No es sorpresa: su poder de convocatoria sigue intacto. Basta recordar que junto a Floyd Mayweather protagonizó la pelea más lucrativa en la historia del boxeo, con una bolsa de 542 millones de dólares en 2015.
Esta noche, el mundo verá si el Pacman puede volver a hacer historia… una vez más.