EE.UU.- Un ciudadano estadounidense de 37 años inició una demanda contra el Gobierno de Donald Trump por daños y perjuicios tras ser agredido y detenido por agentes federales de inmigración en una de las redadas de Los Ángeles, por lo que exige un pago de un millón de dólares.
El Fondo Mexicano-Americano de Defensa Legal y Educación (MALDEF, en inglés) anunció la querella legal emprendida por Job García, detenido el pasado 19 de junio cuando los agentes migratorios realizaban redadas en un estacionamiento de una tienda de construcción Home Depot.
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La demanda se ampara en la Ley Federal de Reclamaciones por Agravios (FTCA) que cobija actos ilícitos cometidos por empleados gubernamentales en el ejercicio de sus funciones.
La acción legal en contra del Departamento de Seguridad Nacional (DHS), el Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE) y la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP).
Los abogados de MALDEF argumentan que los agentes de ICE y CBP restringieron y detuvieron ilegalmente a García “sin ninguna razón válida” para interferir con su libertad y libertad de movimiento.
El ciudadano grababa a los agentes migratorios durante el operativo en el estacionamiento de la tienda de artículos para el hogar en Hollywood, en la que los agentes rompieron las ventanas de un automóvil para detener a un indocumentado.
García y otros gritaron a los agentes enmascarados que necesitaban una orden judicial para hacer los arrestos y procedió a grabar la escena. El video muestra a uno de los agentes rompiendo la ventanilla de la camioneta, haciendo volar los cristales del vehículo.
Luego, el ciudadano fue derribado por los agentes migratorios, que lo colocaron boca abajo en el piso y se arrodillaron sobre su espalda y el cuello mientras lo esposaban.
Un agente enmascarado le quitó el teléfono y se lo guardó en el bolsillo. García dijo que en ningún momento los agentes le advirtieron de que se alejara o que dejara de grabar antes de su arresto.
A pesar de que los agentes comprobaron que era ciudadano estadounidense lo retuvieron durante más de 24 horas. El video de la redada y el arresto de García se hizo viral.
“La Patrulla Fronteriza y el ICE me castigaron por informar a otros sobre sus derechos y por ejercer los míos”, dijo Job García en un comunicado.
Thomas A. Saenz, presidente y asesor general de MALDEF, señaló que cuando el Gobierno comete una violación generalizada de los derechos individuales de los inmigrantes, el daño “inevitablemente” se extiende a otros.
“En este caso, un ciudadano, actuando al mejor estilo de nuestra democracia, documentó la mala conducta del gobierno para promover cambios en las políticas; fue arrestado y detenido injustamente debido a su raza y sus heroicos esfuerzos”, puntualizó.
Con información de comunicado
EFE
