Durante su trayecto hacia Roma a bordo del Air Force One, el expresidente Donald Trump declaró que no tiene intención de eliminar los aranceles impuestos a China, a menos que Estados Unidos obtenga algo “sustancial” a cambio, como la posibilidad de vender sus productos libremente en el mercado chino.
“Tendremos tratos, pero también los haremos. Nosotros solo fijamos la tarifa, que será razonable, muy razonable, y ese será el final del asunto”, señaló Trump a los reporteros que lo acompañaban.
Al ser cuestionado sobre qué significaría una concesión sustancial, el exmandatario respondió de forma tajante: “Bueno, liberen a China”.
Finalmente, Trump restó importancia a los efectos de su política comercial, asegurando que “todo saldrá bien, esas cosas siempre salen bien”.
Estas declaraciones reafirman su postura proteccionista en materia económica, especialmente de cara a una eventual candidatura presidencial en 2024