Ciudad Juárez, Chih.- La crisis que afecta a Estados Unidos debido a la gripe aviar y la consecuente escasez de huevo ha generado alarma en el país vecino, donde el precio y la disponibilidad de este producto básico han experimentado un notable incremento. Sin embargo, en México la situación es muy diferente: los huevos se siguen consumiendo sin mayores inconvenientes y, aparentemente, a precios que se mantienen estables.
Diversos comerciantes y consumidores de la zona centro de Ciudad Juárez han señalado que, por el momento, no se han registrado problemas en el suministro del producto. “El huevo sigue a $65 en muchos puntos de venta, y aunque en algunas zonas la cartera de 30 piezas puede llegar a costar entre $70 y $90, se mantiene la accesibilidad para el consumidor”, comentó uno de los comerciantes locales. Esta estabilidad contrasta con la realidad estadounidense, donde analistas indican que el precio actual del huevo en diversos estados ronda los $0.50 dólares por pieza, lo que equivale a aproximadamente $10 mexicanos cada uno y hace que una cartera de 30 huevos alcance los $300.
El impacto en Estados Unidos no se limita únicamente al producto en sí, sino que también ha generado aumentos en el precio de numerosos alimentos y platillos que dependen del huevo como ingrediente esencial. “Un desayuno sin huevos prácticamente no sería desayuno. Huevitos rancheros, chiles rellenos, pasteles y otros productos se verían afectados, ya que el huevo es un componente fundamental en la mayoría de las recetas”, manifestó un consumidor durante una entrevista en vivo.
La situación ha dado lugar a múltiples opiniones. Algunos recuerdan con nostalgia la tradición de adquirir el huevo “a $65, el huevo barato”, mientras que otros advierten sobre las consecuencias que tendría que el aumento en EE.UU. se replicara en México. “No quiero ni imaginarme cómo sería un desayuno sin huevo en nuestro país, especialmente considerando su importancia en platillos tradicionales”, expresó otro entrevistado.
Asimismo, se ha comentado que el alza de precios en el mercado estadounidense no se debe a los aranceles ni a políticas comerciales, sino directamente a la crisis sanitaria derivada de la gripe aviar, que obliga a pagar más por este insumo. De hecho, en Texas se ha reportado que la cartera de huevos se comercializa por alrededor de $21 dólares, situación que sin duda encarece la cadena de producción y distribución.
En el ambiente del mercado, se han presentado hasta intentos de contrabando de huevos provenientes de México hacia Estados Unidos, lo que ha llevado a que las autoridades refuercen la vigilancia y las medidas para evitar la entrada clandestina de este producto.
Aunque la conversación entre comerciantes y consumidores en zonas fronterizas se torna amena y llena de anécdotas –incluso surgen debates sobre el uso del huevo en la elaboración de tortillas de harina o de maíz– lo cierto es que para muchos, el huevo sigue siendo un insumo insustituible en la despensa mexicana. Mientras EE.UU. enfrenta retos en su cadena de suministro, México continúa disfrutando de la disponibilidad y precios relativamente accesibles, lo que reafirma la importancia de contar con políticas de abastecimiento que garanticen el suministro de productos básicos en tiempos de crisis.



