México – La crisis financiera en torno a Grupo Elektra parece no tener fin. La Bolsa Mexicana de Valores (BMV) volvió a suspender la cotización de las acciones de la empresa de Ricardo Salinas Pliego, apenas un día después de haber permitido su reactivación. Este nuevo revés en la bolsa mexicana se da en un contexto de variaciones inusitadas en el precio de los valores de la empresa y una falta de divulgación de eventos relevantes que causan incertidumbre en los inversionistas.
Con el multimillonario adeudo de TV Azteca y una demanda en puerta bajo el Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), la situación para Salinas Pliego se torna más compleja cada día. La BMV anunció este miércoles una nueva suspensión de la cotización de las acciones de Grupo Elektra.
De acuerdo con el comunicado emitido por la BMV, la suspensión tiene como objetivo evitar que se generen condiciones desordenadas o prácticas que no se ajusten a los estándares del mercado. En un escenario donde los inversionistas están buscando respuestas sobre el futuro de Grupo Elektra y las empresas asociadas a Salinas Pliego, esta nueva suspensión llega en un momento crítico.
Un conflicto financiero que sigue escalando
Este problema financiero viene desde julio, cuando la BMV decidió suspender la negociación de los títulos de Grupo Elektra, tras un reporte de la compañía sobre un posible fraude cometido por depositarios de sus acciones. A pesar de que la empresa informó sobre estas irregularidades y el mercado decidió reactivar la cotización de los títulos el martes, la situación cambio cuando la BMV decidió suspender nuevamente tras los alarmantes cambios en el precio de los valores.
La incertidumbre ha crecido rápidamente entre los inversionistas, quienes ven en este caos una señal de alerta ante la posibilidad de más revelaciones financieras negativas. A lo largo de los últimos meses, los valores de las empresas de Ricardo Salinas Pliego han estado bajo escrutinio, principalmente debido a las complicaciones relacionadas con su compañía de medios, TV Azteca.
TV Azteca y la deuda que no se ha saldado
Uno de los factores que ha contribuido a su inestabilidad financiera, es la deuda pendiente de TV Azteca, que asciende a 400 millones de dólares. En 2017, la televisora emitió bonos de deuda, prometiendo a los inversionistas un interés anual del 8.25%. Sin embargo, el incumplimiento de los pagos ha puesto a todo el conglomerado empresarial de Salinas Pliego, bajo una enorme presión financiera.
La falta de claridad sobre cómo se resolverá este adeudo ha inquietado a los mercados y ha encendido las alarmas en los sectores económicos y políticos del país. La falta de un plan de reestructuración financiera claro, sumado a las disputas legales en curso, han profundizado la percepción de riesgo entre los actores financieros.
¿Una demanda bajo el T-MEC en puerta?
Durante su conferencia matutina de este miércoles, la presidenta de México, Claudia Sheinbaum, señaló que el conflicto de TV Azteca con los tenedores de bonos podría escalar a una demanda contra el Estado mexicano, en el marco T-MEC. De acuerdo con la mandataria, el arbitraje internacional iniciado por empresas estadounidenses en relación con los adeudos de TV Azteca podría derivar en una demanda al gobierno mexicano.
Sheinbaum afirmó que este problema está relacionado con el Poder Judicial mexicano, a quien atribuyó la responsabilidad de los eventos que podrían culminar en un litigio internacional. Sin embargo, la presidenta dejó claro que se necesitará más información, la cual se espera sea proporcionada por la Secretaría de Economía en los próximos días, antes de hacer una valoración más profunda.
“Es una demanda, en realidad, al Estado mexicano, pero por responsabilidad del Poder Judicial, de acuerdo a la demanda, esa es la nota, y cuando tengamos más información de la Secretaría de Economía lo comentamos, pero es interesante, muy interesante”, comentó Sheinbaum.
El impacto del arbitraje en la estabilidad de Grupo Elektra
El arbitraje internacional y la posible demanda bajo los términos del T-MEC complican aún más la situación financiera de Grupo Elektra y sus empresas asociadas. La incertidumbre sobre cómo se resolverá este conflicto podría afectar la percepción de los inversionistas extranjeros sobre el entorno económico de México, particularmente en lo que respecta a la seguridad jurídica y la estabilidad de las inversiones en el país.
La repercusión de una demanda de esta magnitud no solo recaerá sobre Salinas Pliego, sino que también podría generar tensiones en las relaciones comerciales entre México, Estados Unidos y Canadá. El T-MEC, que entró en vigor en julio de 2020, tiene como uno de sus pilares la protección de las inversiones y la resolución de disputas a través de mecanismos internacionales.
Si este conflicto escala a niveles internacionales, podría poner a prueba las cláusulas del tratado y la capacidad de México para defender sus decisiones jurídicas ante tribunales internacionales.
Mientras las autoridades y los inversionistas aguardan más información sobre la situación, la suspensión de la cotización de Grupo Elektra genera más preguntas que respuestas. La falta de transparencia en cuanto a las razones específicas detrás de las fluctuaciones extraordinarias en el precio de las acciones solo ha aumentado la desconfianza en los mercados.
Quinto Poder
A.R.
