El programa social Pensión Bienestar, dirigido a los grupos más vulnerables de México, principalmente adultos mayores, está programado para continuar sus pagos bimestrales, con la próxima entrega prevista para finales de junio o durante julio de 2024.
Este pago corresponderá al periodo de julio-agosto, con un monto de 6 mil pesos, como parte de un esfuerzo por apoyar a los ciudadanos en sus necesidades básicas. La Secretaría del Bienestar, responsable del programa, aún no ha confirmado las fechas exactas de este próximo ciclo de pagos.
Desde su inicio en enero de 2019, durante el gobierno de López Obrador, la Pensión Bienestar ha sido un pilar en la estrategia de asistencia social del país, proporcionando apoyos económicos no solo a adultos mayores, sino también a otros sectores vulnerables.
Estos incluyen personas con discapacidad, niños y niñas de madres trabajadoras, y menores con discapacidad, con montos asignados de 3 mil 100 pesos, mil 600 pesos y 3 mil 600 pesos respectivamente, vigentes hasta 2024.
Mayo-junio: no se realizó pago debido a las elecciones de 2024.
En 2020, un decreto publicado en el Diario Oficial de la Federación (DOF) reformó y adicionó el artículo 4° de la Constitución Mexicana para otorgar a este programa social el rango de “constitucionalidad”, asegurando el derecho a una pensión no contributiva para todos los adultos mayores del país mayores de 65 años.
Este cambio constitucional refleja el compromiso del gobierno para con sus ciudadanos más mayores, asegurando que el beneficio de la pensión sea permanente y sostenido a través del tiempo.
Con la próxima activación de los pagos, la Secretaría del Bienestar busca no solo cumplir con su calendario establecido, sino también reafirmar su objetivo de apoyar a los ciudadanos que más lo necesitan, fortaleciendo así el tejido social y económico de las comunidades a través de todo el país.
¿Por qué muchas pensiones se pagan al bimestre?
Las pensiones para adultos mayores se otorgan por bimestre por varias razones prácticas y administrativas:
– Eficiencia Administrativa: Distribuir los pagos cada dos meses reduce la carga administrativa y los costos asociados con la emisión y el procesamiento de pagos. En lugar de procesar los pagos mensualmente, los recursos humanos y tecnológicos se utilizan de manera más eficiente al reducir la frecuencia de estos procesos.
– Gestión de Recursos Financieros: Los gobiernos o las instituciones encargadas de distribuir las pensiones pueden manejar mejor sus presupuestos y flujos de caja al distribuir los fondos bimestralmente. Esto permite una planificación más precisa y una asignación de recursos más efectiva.
– Reducción de Costos Bancarios: Al reducir la frecuencia de los pagos, también se disminuyen los costos bancarios asociados con las transferencias de dinero. Menos transacciones significan menos comisiones y gastos administrativos.
– Facilitar la Planeación Financiera de los Beneficiarios: Para algunos beneficiarios, recibir una cantidad mayor cada dos meses puede facilitar la planificación de sus gastos, permitiéndoles hacer pagos grandes de manera más cómoda, como el alquiler o compras significativas.
– Logística y Distribución: En áreas rurales o con difícil acceso, la logística de distribución puede ser compleja. Realizar pagos bimestrales puede simplificar la logística y reducir la frecuencia con la que se debe organizar la distribución física de los pagos.
Pensiones más frecuentes
– Pensión por jubilación: Otorgada a los trabajadores que alcanzan la edad de retiro y cumplen con los requisitos de cotización establecidos por el sistema de seguridad social. Esta pensión proporciona ingresos regulares una vez que el trabajador se jubila.
– Pensión por invalidez: Dirigida a personas que sufren una incapacidad total o parcial que les impide trabajar. Se otorga siempre y cuando se cumplan ciertos criterios de evaluación médica y de cotización.
– Pensión por viudez: Otorgada a cónyuges sobrevivientes después del fallecimiento del trabajador asegurado. Esta pensión ayuda a mantener el nivel de vida del cónyuge viudo o viuda.
– Pensión por orfandad: Destinada a hijos menores de edad o con discapacidad que han perdido a uno o ambos padres asegurados. Proporciona apoyo económico para su manutención y educación.
– Pensión por cesantía en edad avanzada: Se otorga a trabajadores que alcanzan una cierta edad (generalmente 60 o 65 años) y que, aunque no están incapacitados, ya no pueden seguir trabajando. Deben cumplir con un número mínimo de años de cotización.