La NASA y Boeing anunciaron un nuevo retraso en el lanzamiento de la primera misión tripulada de la nave Starliner. La fecha prevista para el inicio del viaje hacia la Estación Espacial Internacional (EEI) se ha reprogramado para el próximo 25 de mayo.
La causa principal de este retraso es la necesidad de resolver una “pequeña fuga de helio en el módulo de servicio de la nave espacial Starliner de Boeing”, según informó la agencia espacial estadunidense.
La misión, conocida como Crew Flight Test (CFT), tenía originalmente programado su despegue para el 21 de mayo desde el complejo de lanzamiento de la Estación de la Fuerza Espacial de Cabo Cañaveral, en Florida.
Este aplazamiento marca la cuarta vez que se retrasa esta misión desde su fecha inicial de despegue el 6 de mayo. En esa ocasión, el lanzamiento fue suspendido debido a una anomalía en un tanque de oxígeno líquido del cohete propulsor Atlas V de United Launch Alliance (ULA).
Pruebas realizadas el pasado miércoles en el sistema de helio de la Starliner indicaron que “la fuga en la brida es estable y no representaría un riesgo a ese nivel durante el vuelo”.
No obstante, los técnicos continuarán con las pruebas para asegurar el rendimiento óptimo de la nave.
De mantenerse la nueva fecha, el 25 de mayo a las 15:09 hora local (19:09 GMT), la nave y su tripulación permanecerán alrededor de una semana en la EEI antes de regresar, con un aterrizaje previsto en el suroeste de Estados Unidos y apoyándose en un sistema de paracaídas.
El éxito de esta misión es crucial para Boeing, ya que permitirá a la empresa obtener las certificaciones necesarias para operar como un segundo proveedor de servicios de transporte de carga y tripulación hacia la EEI.
Actualmente, SpaceX cumple este rol, resultado de millonarios contratos con la NASA.
Excelsior
O.R.