El pasado jueves 11 de abril, el mundo del espectáculo se sumió en la tristeza al conocer el fallecimiento de la icónica actriz Lorena Velázquez, a la edad de 86 años.
La noticia fue confirmada por la Asociación Nacional de Actores (ANDA) a través de las redes sociales, donde expresaron su pesar y enviaron condolencias a sus seres queridos.
“La Asociación Nacional de Actores lamenta profundamente el fallecimiento de nuestra compañera Lorena Velázquez. Nuestras condolencias a sus familiares, amigos y compañeros. Descanse en Paz”, escribieron en redes sociales.Su hijo la encontró sin vida al intentar despertarla
Lorena Velázquez fue una figura destacada en la época dorada del cine mexicano, reconocida por su talento y elegancia en la pantalla grande. Su partida deja un vacío en la industria cinematográfica y en el corazón de quienes la admiraban.
Los últimos momentos de Velázquez estuvieron marcados por la cercanía y el amor de su hijo, Eduardo Novoa Villar, quien reveló detalles conmovedores sobre los días previos al triste desenlace en un breve encuentro con la prensa.
Según Novoa, cada día despertaba a su madre tomándola de la mano, un gesto que se repetía hasta hace poco, cuando Velázquez no respondió al llamado de su hijo, reportando su triste fallecimiento.
“Ella cuando la encontré estaba dormida, como siempre se duerme, la cosa es que yo llegaba, le agarraba la mano y ella abría los ojos, esta vez no los abrió, entendí muchas cosas; fue muy sorpresivo”, reveló.
Hijo de Lorena Velázquez revela que sufrió depresión sus últimos meses de vida
La actriz, quien atravesaba una etapa de depresión en sus últimos meses, había expresado su incomodidad por la situación en la que se encontraba.
Novoa relató que su madre había sufrido problemas respiratorios y estaba plagada de flemas, además de experimentar una notable disminución en su audición, lo que la llevó a una caída que afectó su ánimo y equilibrio.
“Cayó en una depresión porque se resbaló, tenía problemas de audición, entonces de ahí vino la falta de equilibrio y de ahí vino la depresión que duró dos meses y medio, tres”, explicó.
A pesar de las dificultades, el hijo de Velázquez destacó el período de cuidado y cercanía que vivió junto a su madre durante su depresión, describiéndolo como una experiencia enriquecedora y reveladora.
“A mí me sirvió mucho porque fomenté muchas cuestiones personales, tratar a la mujer que me dio la vida como un bebé, fue enriquecedor de muchas maneras”, dijo conmovido su hijo.
La partida de Lorena Velázquez deja un legado imborrable en la industria del cine mexicano, recordándola no solo por su talento frente a las cámaras, sino también por su humanidad y el impacto que dejó en quienes la rodearon.
En sus últimos momentos, Eduardo Novoa encontró consuelo al imaginar el reencuentro de su madre con seres queridos que la precedieron en la muerte, entre ellos su tía Tere Velázquez y su amiga, la recordada actriz Edith González.
“Ahorita ha de traer una fiestota con su hermana, ustedes saben cómo reaccionaba ante la hermana… con Edith (González)”.
Ahora, la actriz será despedida en una ceremonia de cremación, pero su legado y su memoria perdurarán en el corazón de aquellos que la amaron y admiraron. Lorena Velázquez, una leyenda del cine mexicano, descansa en paz.
