Argentina.- Una mujer de 72 años fue asesinada en su casa la noche del domingo por dos delincuentes que la asaltaron y la apuñalaron cuatro veces. Uno de los presuntos homicidas, un joven de 21 años, se entregó a la policía tras ser denunciado por su padre, quien lo encontró con objetos robados de la víctima.
La mujer, identificada como Teresa Pepa, vivía sola en su domicilio de la ciudad de Quilmes, en el sur del Gran Buenos Aires. Según las fuentes policiales, los asaltantes ingresaron a la casa por una ventana y la sorprendieron cuando estaba en su habitación. La ataron con cables y la golpearon para que les entregara dinero y objetos de valor. Luego, le asestaron cuatro puñaladas en el pecho y el abdomen y huyeron con un televisor, un celular y otras pertenencias.
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La familia de Teresa Pepa se alarmó al no poder comunicarse con ella y acudió a su casa para verificar su estado. Uno de sus hijos encontró el cuerpo de su madre con signos de violencia y dio aviso a la policía. La mujer era muy querida y respetada en el barrio, donde vivía desde hacía 40 años.
La investigación del caso condujo a la detención de uno de los sospechosos, un joven de 21 años llamado Yonatan Molina, quien era vecino de la víctima. El padre del joven, Gustavo Molina, lo entregó a las autoridades tras reconocer algunos de los objetos robados de la casa de Teresa Pepa. El hombre declaró que su hijo estaba acompañado por otro sujeto, al que no conocía, y que no creía que él fuera el autor material del crimen.
Estuvo con otro más. Un vecino lo vio a la tarde con otro pibe que no conoce. Yo no creo que haya sido él porque vino sin manchas de sangre, nada”, afirmó en entrevista para TN.
Gustavo Molina también contó que su hijo consumía marihuana y pastillas y que solía escaparse de su casa. “Yo lo iba a buscar a la villa y él se volvía a ir”, dijo. El hombre se mostró consternado por lo ocurrido y aseguró que le pidió a su hijo que dijera la verdad. “En la comisaría lo abracé, le dije que lo quería y que dijera la verdad”, expresó.
La policía continúa buscando al otro implicado en el asalto y el homicidio de Teresa Pepa, quien se encuentra prófugo. El caso está a cargo de la fiscal Karina Gallo, de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 4 de Quilmes, quien caratuló la causa como “robo agravado por el uso de arma blanca en concurso real con homicidio criminis causa”.
