Estados Unidos.-Durante la noche del viernes 2 de junio, Soraya Kronawetter descubrió que su gato regresaba a casa con su rostro herido y completamente cubierto de sangre.
Mi gata salió y la estuvimos buscando y llamando por su nombre, y luego, dos días después, apareció en la casa y tenía los ojos, la cara y el cuerpo cubiertos de sangre, y el ojo se le salía de la cabeza”, dijo Soraya.
Preocupada por su estado, la llevó de inmediato al veterinario, donde se descubrió que había sido víctima de un disparo intencional. Alguien la había sujetado por la cabeza y le había puesto el arma en la boca para luego apretar el gatillo. Afortunadamente, la bala no alcanzó su cerebro, lo que le permitió sobrevivir, pero permanece alojada dentro de su cabeza, dificultando su proceso de recuperación.
“No puedo perderla. Es la gata más increíble y hermosa que he conocido. No puedo creer que alguien pueda dispararle a un gato en la cara. Estoy en completo shock y estoy absolutamente enferma. Tienen que quitarle el ojo y la bala, y la cirugía cuesta $11,000. Sus signos vitales están bien y responde. Si somos capaces de recaudar este dinero, ella lo logrará.”
Para costear el procedimiento, Soraya abrió una cuenta en GoFundMe con el fin de permitir que las personas contribuyeran económicamente para cubrir los gastos de la cirugía de su mascota. En la descripción de la campaña, se detalla el procedimiento necesario para tratar a Carly, cuyo costo total ascendía a al menos 11 mil dólares (equivalentes a unos 191 mil 850 pesos mexicanos).
La campaña sigue vigente, en espera de que más personas se sumen a la causa y logren salvar la vida de la gatita.
Con información de Excelsior.